viernes, enero 11, 2008

Asociación Bodón

Nuestros amigos de la Asociación Bodón acaban de remitirnos una carta de su Presidenta, Camino Alonso, sobre el despropósito con el que REE, el Gobierno Central y la Junta de Castilla y León, van a destruir nuestra montaña central y oriental hipotecando el futuro de nuestra tierra y comprometiendo seriamente la salud de sus habitantes. Os recomendamos vivamente su lectura:

EL HIJO QUE NADIE QUIERE

Me pongo a pensar y quiero hacer una pregunta, ¿este proyecto tiene padre? o por el contrario y como se decía antaño resulta que es un hijo de madre soltera.

Me explico. El día 26 de abril del 2005 aparecen en los medios el Sr. Montilla, el Sr. Areces y el Sr. Herrera muy, pero que muy sonrientes porque al parecer casi han descubierto la pólvora. Se dan la mano todos ellos para la foto (nunca vi darse una mano a tres bandas), piensan que es una hazaña lo conseguido, tienen un proyecto monstruoso para León y sonríen como niños con un juguete nuevo. Visto esto parece que ya teníamos padre para la criatura, el ministerio de energía, pero no es así.

La Sra. Narbona Ministra de Medio Ambiente nos desvela hace apenas dos días que el padre no es el ministerio de energía sino que es REE.

REE en sus declaraciones insiste en que esto es un proyecto nacional y como tal es dependiente de Industria. El Gobierno dice que esto es cosa de la Junta y resulta que la Junta dice que esto es cosa del Gobierno.

La Diputación (el servicio de asistencia a municipios) hace las alegaciones para los ayuntamientos pero no presenta sus propias alegaciones. El PSOE dice por boca de su secretario provincial, Sr. Miguel Martínez, que sin consenso esta línea no se hace, pero siguen para adelante con la misma. La Junta dice que velarán por el cumplimiento estricto de la normativa medioambiental (pues solo faltaría que no fuera así), pero que ellos no tiene nada que ver con el asunto.

El caso es que tenemos a la criatura sin padre, no es de extrañar con lo monstruoso que es el hijo que les ha salido de sus entrañas y que pretende arrancarnos las de nuestra montaña central y oriental en León.

Todos abominan el proyecto y se enzarzan en enviar su autoría de uno a otro, ofrecen compensaciones, como si estas pudieran pagar el futuro de nuestra tierra y el futuro de las próximas generaciones.

Este monstruoso proyecto es un rejón de muerte y olvido a estas tierras que nos vieron nacer y crecer y que queremos que algún día nos vean morir.

Muchos de nuestros ancianos tuvieron que salir y emigrar de ellas hacia zonas mas ricas en industria y ya en el caer de su edad regresaron a ellas y es ahora cuando sus hijos y en muchos casos sus nietos vuelven a ellas para comenzar un futuro de esperanza, es ahora cuando en la inmensa mayoría de estos nuestros pueblos que comenzaron de diez años para acá a repoblar de descendientes de esta gente que en su día y con el dolor de abandonar su tierra están regresando hacia un futuro esperanzador basado en el desarrollo sostenible con el medio ambiente.

Todavía ayer leo las declaraciones del Sr. Silvan afirmando que el futuro de León esta en el desarrollo del turismo y mas concretamente en el turismo rural, que paradoja cuando estamos hablando de terminar con la vida de las tierras que tendrían que darnos ese futuro para León.

Vamos a esperar que la cordura entre en la cabeza de estos nuestros representantes políticos, tanto de un lado como del otro, y si por una vez se ponen de acuerdo que sea para determinar que este proyecto no es para León ni sus gentes, ni para sus montañas y sus tierras.

El deseo para el año nuevo será que la línea Sama- Velilla duerma el sueño de los justos y quede el cajón del que nunca jamás debió de salir para acechar estas tierras de nuestro corazón.

Camino Alonso Diez.

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